🌿 Perfume, elegancia y floración prolongada
El jazmín del cabo injertado es una joya para cualquier jardín. Sus flores blancas, delicadas y perfumadas llenan el aire de fragancia durante gran parte del año. Al estar injertado, este ejemplar ofrece mayor resistencia, mejor adaptación y una floración más generosa y duradera.
Ideal para macetas, patios, balcones o jardines. Requiere buena luz, riego regular y suelo levemente ácido. Sus hojas verdes brillantes contrastan con la pureza de sus flores, creando una planta de gran valor ornamental.
✨ Una planta de colección, perfecta para regalar o disfrutar todo el año.